Transición energética: Enel presenta su índice de circularidad
En relación con la transición energética, queremos ahondar en el nuevo KPI de Enel, en donde se pone en la balanza su rendimiento económico con respecto al consumo global de recursos. Veamos qué nuevos retos y compromisos implica medir el índice de circularidad.
Transición energética
El índice o tasa de circularidad es un elemento establecido por la Unión Europea para dar seguimiento a la economía circular y poder medir la cantidad de recursos naturales que utiliza una empresa, cuántos provienen de materiales de desechos reciclados y qué tanto se han evitado las extracciones de materias primas vírgenes.
El estudio del índice de circularidad también se analiza de manera muy precisa según el rubro; se pueden estudiar los minerales metálicos o no, la biomasa, los minerales, etc. En el caso del KPI de Enel, la medición de su índice de circularidad se centró en la comparación de su rendimiento económico con su consumo global de recursos.
Enel tiene establecido como meta lograr para 2030 duplicar sus índices para llegar a ser líderes de la transición energética. Es una meta ambiciosa, pero los líderes de la empresa están convencidos de que con la ayuda de sus socios, el gobierno y la sociedad en general podrán alcanzarla.
¿Cuáles son las metas establecidas por Enel?
La intención de Enel para poder duplicar sus índices para 2030 es, en principio, evitar consumir materias primas, y en cambio utilizarlas para que estén a disposición de futuros ciclos de producción y futuras generaciones. Parte de esta idea surge de la creciente demanda global por materias primas y por considerar que es posible que en el futuro no las tengamos o que escaseen.
Enel, siguiendo el indicador contable de la rentabilidad de una empresa o EBITDA, está estimando la cantidad de recursos que ha consumido como combustibles o materia prima en cada uno de sus departamentos para poder reducirlos a la mitad, meta para 2030, y estar al máximo consciente y en evaluación de los recursos para hacer un máximo aporte en la responsabilidad como líder en la sustentabilidad.
Otra de las metas de Enel con este nuevo KPI es convertirse en un modelo de negocio circular (según la información aportada por Ernesto Ciorra, el Chief Innovability Officer de Enel en Foro Económico Mundial de Davos) a través de las iniciativas con el llamado Circular Procurement, en el que se trata de involucrar a los proveedores para que ellos también formen parte de las estrategias de cuidado del planeta pues, sin su colaboración, es imposible que la transición hacia una economía circular sea efectiva.
Es de entender que las metas establecidas en el nuevo KPI se estimen para 2030 si se toma en cuenta que Enel cuenta con más de 8000 proveedores en todo el mundo. Nuevamente, se habla de una tarea ardua, pero que de cumplirse involucrará a muchas empresas a nivel mundial.
El último aspecto que ayudará a Enel a cumplir sus metas será el uso de las métricas de circularidad desarrolladas para los clientes. Esto se trata de una herramienta que permite a los empresarios rediseñar sus negocios con el fin de alcanzar la sustentabilidad gracias a la asesoría de los expertos en economía circular que están dispuestos a trabajar como guías constantemente.
Las asesorías que ofrece Enel a sus clientes están avalada por la Universidad de Sant'Anna y por la empresa RINA, está última, considerada como una autoridad en los estudios de la economía circular.
¿Cuál es el interés de Enel por la economía circular?
La economía circular busca que la vida de los productos o materias primas se extienda a su máximo posible. Este es un modelo que toma dos áreas importantes, el consumo y la producción, de allí la imperante necesidad de reutilizar, renovar compartir y trabajar en equipo con clientes y proveedores para que toda la cadena de trabajo se comprometa con el medio ambiente. Si bien en el pasado las empresas solo se encargaban de producir y desechar, ahora el planeta nos exige producir y reciclar, y, como hemos dicho anteriormente, esta tarea no será posible si los clientes, países y proveedores no se adscriben a la causa.
Enel sin duda ofreció en este 2023 la noticia empresarial más esperada por los activistas ecológicos, y la más impactante para su competencia al ser la primera empresa del mundo en lanzar un índice de circularidad. Queda claro que es un objetivo ambicioso y difícil de conseguir, pero no es imposible. De hecho, con sus aspiraciones creará una competencia buena en el mercado e inspirará a otras compañías a seguir sus pasos. Estamos ya en puertas de ver un futuro sin tanta contaminación y más sustentable, seguiremos de cerca los cambios y aportes que se vayan desarrollando hasta el 2030.
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